Reflexión de comentarios en sede.
Al discutir las lecturas del movimiento Slow Down, llegamos a la conclusión que debemos buscar el equilibrio en todos los aspectos de nuestra vida, además que debemos disfrutar de las cosas más sencillas, por ejemplo, una simple conversación, los placeres que nos brinda la naturaleza, una comida saludable en compañía de seres queridos, entre muchas otras cosas.
Por otra parte, reconocimos que la filosofía Slow Down es muy buena, pero desafortunadamente en países latinoamericanos como el nuestro, es difícil aplicarlas en su totalidad, debido a que estamos inmersos en un sistema económico explotador de sus recursos, ambientales, económicos y humanos. Para empezar, una de las principales características para pertenecer a esta filosofía es vivir en una población no mayor de 50,000 habitantes, cosa que con la magnitud de personas que tiene el Distrito Federal, sería imposible. Ahora bien, pensamos que no necesariamente se tiene que vivir en poblaciones pequeñas para lograr una buena calidad de vida, en nuestro caso, podríamos poner en práctica esta filosofía, si reflexionamos y tomamos conciencia de la necesidad de vivir más relajados o buscar un estilo de vida equilibrado y de recuperar la sensibilidad humana para establecer relaciones armoniosas
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